En el proceso productivo actual, el productor no tiene responsabilidad sobre la procedencia de sus insumos ni de la disposición final de sus productos. Al no ser responsable de esas etapas, los costos que se generan en la mismas son externalizados en el medio ambiente y sus ciudadanos. Esto significa que el productor no tiene ninguna injerencia ni obligación en el destino final del artículo que fabricó, a pesar de que quizás el producto acarreé severas consecuencias futuras para la salud de la población. Es por eso que lo que se busca con la ley de Responsabilidad extendida del productor es evitar la disposición inadecuada de los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE) en vertederos de residuos ordinarios, a través de la implementación de un tratamiento específico. Y para ello, es necesario transferir parte de la responsabilidad de la gestión de RAEE desde los municipios a los productores, como una posible solución a esta problemática. |